Camino de las Piedras del Dolor

La insólita propuesta de construir el llamado “Vía Crucis del hombre moderno“ encontró una ubicación perfecta en la sierra Písecké hory. Este proyecto, basado en el simbolismo del Vía Crucis cristiano, lanza un mensaje claro: 14 dolores 14 estaciones antes de llegar a la cima, donde se sitúa la estación de la Esperanza. El recorrido del vía crucis es de 1,5 km y asciende por el pintoresco paraje de un parque natural hasta el Mirador de los Técnicos Forestales de Písek, bajo la colina Jarník (609 m.s.n.m.).

La arquitecta Laura Jablonská fue la profesional elegida para diseñar el Camino de las Piedras del Dolor. Desde el principio del proyecto trabajó el concepto de la piedra como símbolo de carga y peso. En cooperación con los estudiantes de Písek, fueron eligiendo piedras excepcionales por su forma y color, con un peso de 5 a 7 toneladas, de la cantera de Písek. Las piedras seleccionadas fueron ancladas verticalmente en el terreno. El elemento artístico unificador del camino ha sido un círculo como símbolo de integridad, infinito y eternidad. El principio está presente en cada uno de los dolores y culmina en la estación Esperanza.

En cada piedra se halla fijado una aro de metal que lleva el nombre del dolor y una lágrima de vidrio color rubí que simboliza una gota de sangre. Tras la decimocuarta estación, el camino sube abruptamente por un terreno accidentado hasta la cima, donde se sitúa el Mirador de los Técnicos Forestales de Písek. En sentido figurado, se hace alusión al difícil camino de la esperanza, para el que es necesario tener mucha voluntad y hacer acopio de fuerza.